martes, 2 de julio de 2013

sinceramente.

Julio comienzas muy bipolar, hace tiempo no tenía una crisis como la de hace un rato (creo que hace un año) pero llega el momento de hacerme la fuerte, e intentar que nadie lo perciba. Poder aterrizar, tocar tierra y responder dudas, revizar los formatos que me envian los coordinadores, gestionar y llamar para mañana lo de Sofía, informar respecto al tema de Sara, y luego, lo del chequeo especialmente. Aunque mi mente esté a 50mil Km de todo eso. (Quiero irme de aqui, otra vez)



Quiero desnudarme ante alguien,  no me refiero corporal ni físicamente, quiero desnudar mi alma, despojar mis miedos, quiero hacerme trasparente , poder llorar abrazada a alguien, explicarle mis frustraciones, mi rabia, mis pensamientos.

Es la primera crisis que me agarra sola (Sí, ahora todo es nuevo) y lo único que atiné fue a ponerme a llorar debajo de miles de colchas con el celular desconectado del internet, necesitaba despejarme un momento, alejarme de todo porque no quería complicar más las cosas y solo esperar que todo terminara, que lograra calmarme para nuevamente seguir en el camino.
Muchas cosas aún no tienen solución y sigo esperando a alguien que me apoye, me guíe (quizá no debería, tendría que ser autosuficiente, fuerte, pero en estos momentos no lo soy y nada lo va a cambiar, tengo derecho a extrañar a alguien -nadie en específico, debo decir- y no tiene nada de malo en eso) Pero no hay nadie, y es eso lo que me impulsa a ser diferente, lo que me impulsa ahí a decir, Ok tania, estás sola, camina para adelante que de esta sales. 
Tengo derecho a extrañar y será esa misma sensación la que me aliente a continuar con este proceso.  Lloraré aún todo lo que me sea necesario para  volver a mi tranquilidad aparente, lloraré porque necesito descargarme, es un proceso y e mi depende salir del túnel donde me encuentro hoy :/ (reportaré avances) 

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